La asociación afirma que el texto del proyecto asegura la sostenibilidad fiscal, permitiendo ajustes presupuestales progresivos a mediano y largo plazo para cumplir con las obligaciones establecidas. Este enfoque gradual está diseñado para integrarse dentro del marco fiscal general, asegurando que los subsidios se implementen de manera consistente y beneficiosa para las familias vulnerables de Colombia, especialmente aquellas en los estratos 1, 2 y 3.
Luz Stella Murgas, presidenta de Naturgas, subraya que este proyecto no solo es una cuestión de justicia social, sino también de salud pública, dado que el uso continuado de combustibles contaminantes como la leña está vinculado a mayores riesgos de enfermedades respiratorias. Por lo tanto, facilitar el acceso al gas natural no solo mejora la calidad de vida de estas familias, sino que también promueve un entorno más limpio y seguro en sus hogares.
A pesar de la objeción inicial del Gobierno, Naturgas confía en que el Congreso de la República reconsiderará el proyecto con el espíritu de beneficiar a las familias más vulnerables del país, sin comprometer su acceso a la transición energética necesaria para reducir la pobreza energética y cerrar las brechas de desigualdad.