ECONOMIA
El euro inició la jornada del 22 de julio cotizando en Colombia a un promedio de 4,374.18 pesos colombianos, marcando un incremento del 1.27% respecto a la sesión anterior, cuando se situaba en 4,319.40 pesos. En el contexto más amplio, en los últimos siete días ha experimentado un aumento del 2.23%, aunque aún muestra una caída del 0.76% en comparación con hace un año.
Durante las últimas tres sesiones, el euro ha mostrado una tendencia ascendente, reflejando una volatilidad del 12.8% en la última semana, ligeramente inferior al 13.9% anual, indicando un periodo reciente de mayor estabilidad. Este comportamiento se enmarca en un contexto económico donde el Banco de la República de Colombia proyecta un tipo de cambio promedio de 4,081 pesos por dólar para finales de 2024, reflejando una expectativa optimista frente a picos anteriores observados entre finales de 2022 y principios de 2023.
En cuanto a la inflación, se espera una tendencia a la baja con proyecciones que apuntan a un descenso hasta el 5.61%, aunque aún por encima del ideal de tres puntos porcentuales. A nivel global, el peso colombiano ha sido una de las monedas más apreciadas entre los mercados emergentes, beneficiándose del debilitamiento del dólar debido a eventos internacionales como la crisis en Ucrania y medidas económicas locales implementadas por la Reserva Federal.
En el ámbito interno, la economía colombiana ha visto beneficios por la lenta discusión de reformas propuestas por el presidente Gustavo Petro, contribuyendo al fortalecimiento del peso colombiano que ha alcanzado niveles como los 4,100 pesos por dólar, representando un avance significativo del 16%. Expertos señalan la posibilidad de un rebote que podría llevarlo a los 4,500 pesos.
El euro, como segunda moneda de referencia internacional, también ha sido influenciado por la relación entre el peso colombiano y el dólar, acercándose a la paridad con el dólar y mostrando un valor que en ocasiones ha sido inferior a este, una situación inusual desde hace dos décadas.
En resumen, el panorama actual del peso colombiano refleja una moneda fortalecida frente al euro y otras divisas, impulsada por factores tanto locales como internacionales, que han contribuido a su apreciación y a una mayor estabilidad cambiaria en el corto plazo.