El presidente Joe Biden anunciará este martes un embargo sobre la importación estadounidense de petróleo ruso, en respuesta a la invasión de Ucrania por parte de Moscú, según informaron funcionarios de su administración a la prensa estadounidense.
Biden hablará a las 10:45 am desde la Casa Blanca para "anunciar acciones para continuar sancionando a Rusia por su guerra no provocada e injustificada contra Ucrania".
La medida de Biden, según el New York Times, se daría tras la presión de los congresistas estadounidenses, tanto republicanos como demócratas, para castigar con más contundencia a Rusia.
Los aliados occidentales han mantenido un frente unido sobre las sanciones contra Rusia, pero el lunes surgieron grietas ante la perspectiva de un embargo a las importaciones de petróleo y gas rusos, una medida a la que se opone Alemania, que depende del combustible ruso.
La misma Rusia había reaccionado a esa posibilidad, considerando que el embargo de este tipo tendría "consecuencias catastróficas para el mercado mundial", reaccionó el vice primer ministro ruso de Energía, Alexander Novak, quien también dijo que "el aumento del precio podría ser imprevisible y alcanzar más de 300 dólares por barril".
Según Novak, es imposible sustituir rápidamente el petróleo ruso para el mercado europeo por una fuente alternativa.
"Llevará varios años y será mucho más caro para los consumidores europeos, que serán las principales víctimas de este escenario", advirtió.
Si la medida fuera unilateral por parte de Estados Unidos, "solo tendría un efecto limitado", destacó Louise Dickson, analista de Rystad. Pero "si Estados Unidos llegara a convencer a la Unión Europea de participar en un embargo, eso bloquearía 3,8 millones de barriles diarios de importaciones", añadió.
Este lunes, los temores a un embargo occidental al sector energético ruso disparó el precio del petróleo y el gas natural, provocando la caída de los mercados bursátiles, que temen una ralentización de la economía mundial.