
Esto por el posible riesgo de presencia de niveles inaceptables de la Nitrosamina nitrosodimetilamina (NDMA) en el producto.
“Las Nitrosaminas están clasificadas por la Agencia Internacional de Investigación del Cáncer (IARC), como «probablemente carcinogénicas» (categoría 2) y pueden encontrarse también en el humo del tabaco, algunos alimentos procesados y en ciertos artículos de aseo”, explica el Invima.
Este producto es de alto consumo en el mundo y por eso el Invima recomienda retirar del mercado todos los productos y para las personas que ya lo usan consultar con el médico y suspenderlo de forma inmediata.
La suspensión de la venta se hace sobre los productos orales y no para las formas inyectables.
El efecto principal de la ranitidina es bloquear los receptores H2 (de la histamina) para impedir la producción de ácido, principalmente a nivel gástrico.
“Si usted consume el medicamento ranitidina en cualquiera de sus presentaciones orales debe considerar el uso de otros productos de venta libre aprobados para esas indicaciones. La población en tratamiento con este medicamento debe acudir a su médico para cambiarla por uno alternativo”, indica el Invima.