
"La realidad es que los mosquitos y los patógenos que transmiten siguen circulando. Y sin pruebas o tratamiento, los casos graves de enfermedades transmitidas por mosquitos podrían pasar de ser condiciones fácilmente tratables a (causar) la muerte", dijo Carissa Etienne, directora de la OPS, al señalar la amenaza del dengue y la malaria.