"La caída en operaciones para los meses de marzo a mayo fue de un 50,7% con respecto a los mismos meses del año 2019. Esto quiere decir que entre marzo, abril y mayo de 2020, se hicieron la mitad de las operaciones que se realizaron en el año 2019”, explicó.
“Comparados con el 2019, tanto en número de operaciones como en el valor, hay una reducción significativa, lo que muestra las priorización de necesidades de las personas y empresas para ajustarse a la coyuntura por el covid-19; vemos para mayo que la caída en las operaciones frena, lo que indica un proceso de recuperación y que dependerá en gran parte de factores externos como la respuesta sanitaria y las decisiones para la reactivación de la economía en una nueva realidad”, comentó Eric Hamburger, presidente de Datacrédito Experian.
En lo que tiene que ver con el porcentaje de operaciones por género también es visible una variación entre el periodo marzo-mayo de 2019 comparado con el 2020. Con la pandemia, y en general, las operaciones solicitadas por hombres se redujeron en un 46,7% mientras que las solicitadas por mujeres descendieron cerca de 7 puntos más, reduciéndose en un 53,7%.
"El efecto de la pandemia en la actividad crediticia fue más fuerte en las mujeres que en los hombres y podría estar explicado por la concentración de créditos productivos que realizan las mujeres en situaciones normales”, anotó Datacrédito.
Por rango de edad, los jóvenes entre 18 y 25 años han sido los más afectados por la pandemia, dado que en ellos se registró una caída del 63%, “que pueden atribuirse a una reducción en sus ingresos o a un mayor desempleo”, precisó.
Y agregó que que al analizar por el monto de los ingresos de un solicitante, es visible una disminución de más del 68% en los que tienen menos de 1,5 millones de pesos de ingresos estimados, pasando de ser uno de los rangos más representativos, con cerca de 2,7 millones de operaciones, a menos de 1 millón en 2020; el menor impacto se muestra en el rango de mayores ingresos con una reducción del 33,8%.