Revisar planes de contingencia, capacidad instalada, número de camas, unidades de cuidados intensivos y proyecciones epidemiológicas para atender la emergencia del COVID-19, fue el tema central de la mesa de trabajo que lideró el gobernador del Meta, Juan Guillermo Zuluaga, con representantes de la red hospitalaria pública y privada.
Para el secretario de Salud del Meta, Jorge Ovidio Cruz Álvarez, en el departamento existen 179 camas de cuidado crítico, de las cuales 130 cuentan con respiradores. Además, señaló que el propósito es crecer en camas de cuidado crítico, por eso, el planteamiento es subir a 150 más, que permitiría una mayor respuesta, pero que aún no cuentan con respiradores.
Recordó que el Gobierno nacional aprobó 135 respiradores para la región, y se aspira conseguir otros con Ecopetrol y empresas que se han comprometido para cubrir el número de camas nuevas, diferentes a las existentes en el departamento.
De igual forma, explicó que se viene forjando un ejercicio de expansión, es decir, crecer en el número de camas hospitalarias, que con el esfuerzo de la red privada y de los hospitales departamentales de Granada y Villavicencio, se sumaría a 259 camas más.